CASO FORNERÓN «fue como sacarme una mochila de mucho, mucho peso de la espalda» Dr. Salvador Espona
Tras veinticinco años de dilaciones, sobreseimientos y reclamos internacionales, el viernes 26 de diciembre el Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional N° 18 de Capital Federal resolvió el juicio por la apropiación y retención ilegal (según versa en la justicia) de la hija del ciudadano Leonardo Fornerón, donde quedaron ABSUELTOS todos los imputados. Desde ENTRERIOSNOTICIAS.AR dialogamos con el letrado Salvador Espona, uno de los imputados, ya absuelto.

Hilda Sosa WWW.ENTRERIOSNOTICIAS.AR
Hablar del Caso Fornerón nos remonta al 16 de junio del año 2000 en nuestra ciudad Victoria, fecha de nacimiento de una hoy jóven Arquitecta de 25 años de edad, que fuera dada en adopción otrora a un matrimonio oriundo de Capital Federal.
A partir de allí un padre biológico que aparece en escena diciendo que no sabía del pertinente embarazo de su ex pareja, quien se lo negó hasta que oportunamente se realizara un ADN, pagado por los guardadores, dando resultado positivo y transformándose a partir de allí en un proceso contencioso, ya que éste se presentó oportunamente con un letrado de la vecina localidad de Rosario del Tala, quien lle acompañó en el proceso.
Fornerón, durante años, intentó revertir esa decisión a través de varios planteos judiciales, pero ninguno tuvo acogida favorable. Primero, se le cerró el camino en la justicia de Entre Ríos, donde había iniciado una causa contra la madre biológica de su hija y contra un tercero imputado de actuar como intermediario en la supuesta venta de la niña. Tras quedar firme esa resolución, inició el procedimiento para llegar a la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
Un caso éste, cuya dilación a través del tiempo ha hecho incluso, que el mismo se imponga en diversas casas de Altos Estudios como un leading case, siendo consecuentemente estudiado en diversas facultades de Derecho del país.
Para hablar de ello, desde ENTRERIOSNOTICIAS.AR dialogamos con el abogado Salvador Espona, quien amén de ser el abogado que al inicio del proceso representara al matrimonio porteño, fue uno de los imputados absueltos de manera unánime este viernes 26 de diciembre, junto al resto de los imputados, si bien vale destacar que la querella goza de otra instancia en Casación. (video)
Cronología
En junio del año 2000, Espona fue contratado por un matrimonio de Buenos Aires para tramitar una guarda judicial preadoptiva de una bebé nacida en Victoria, hija de madre soltera oriunda de Rosario del Tala.
Durante el proceso civil de la guarda apareció Leonardo Fornerón, quien se presentó como presunto padre; por lo que a pedido de las partes se realizó un ADN, pagado por los guardadores, que dio positivo, lo que transformó el trámite voluntario en un proceso contencioso.
En el fuero civil, el juez de primera instancia otorgó la guarda al matrimonio adoptante, apoyado en informes psicológicos que advertían que cambiar el entorno de la niña le causaría un daño grave.
La Cámara revocó esa decisión, pero el Superior Tribunal de Justicia restableció la sentencia original. Luego, Fornerón llevó el caso a la Corte Interamericana de Derechos Humanos, que condenó al Estado argentino por irregularidades en el proceso.
A partir de ello, en 2015 se inició una causa penal en Buenos Aires contra diez personas (jueces, abogados, padres adoptivos, profesionales y la madre biológica), acusadas de sustracción y retención de la menor.
Tras años de trámite, el juicio oral concluyó con la absolución de todos los acusados, incluso con el fiscal sosteniendo que no había pruebas para condenar. Los fundamentos se conocerán más adelante.
En el juicio declaró la jóven —hoy de 25 años, profesional y formada en el exterior—, quien manifestó no querer vínculo con sus padres biológicos, relatando al unísono experiencias negativas en los intentos de revinculación durante su infancia.
El letrado Espona puso énfasis en su relato en el fuerte impacto personal y profesional que tuvo el proceso, aunque afirmó que finalmente la justicia llegó.
-ERN:AR: Siempre se ha hecho hincapié en la marcada desigualdad económica de los padres biológicos, respeto de los adoptantes, gozando estos últimos de buena posición. ¿Fue determinante al momento de la decisión judicial?
-Dr. Salvador Espona: No, el proceso se resolvió en base al derecho y al interés superior del niño.
-ERN.AR; A nivel personal ¿cómo vivenció el proceso del juicio?, ya que fue estar en el banquillo de los acusados siendo abogado.
-Dr. Salvador Espona: fue muy difícill, entre otras cosas, a mí me llevó a dejar un poco la profesión, porque es amargante yo actué de buena fe…no te olvides que hay que concurrir a la Ciudad de Buenos Aires, tomar un abogado de allí, si lo podés pagar, ya que no es barato un abogado en Buenos Aires y vivir pendiente de la situación. Difícil no sólo para mí, sino para mis seres queridos, familia, amigos que han estado siempre conmigo con mucha solidaridad.
Párrafo aparte explicó las dos etapas del proceso penal, la etapa de introducción donde la Cámara dio lugar a las acusaciones, dando lugar a la figura del delito de Sustracción de Personas «lo cual fue muy duro convivir con eso» y luego la etapa de juicio, donde finalmente fueron absueltos todos los acusados-
«La verdad fue como sacarme una mochila de mucho, mucho peso de la espalda».-



