Victoria tendrá su inicio del Año Jubilar

Hilda Sosa WWW.ENTRERIOSNOTICIAS.AR

El pasado 24 de diciembre, con el rito de la apertura de la Puerta Santa de la Basílica de San Pedro en el Vaticano, el Sumo Pontífice dio inicio a un tiempo de gracia que se extenderá hasta el 6 de enero del 2026.

En Victoria se hará lo propio este sábado 4 de enero, partiendo desde Plaza Libertad a las 20:15, yendo en procesión hasta Basílica Nuestra Señora de Aránzazu, donde celebrará la Misa Jubilar el obispo diocesano Monseñor Héctor Luis Zordán

Bien vale destacar que el gesto de abrir la Puerta Santa es un rito profundamente significativo, no solo para la Iglesia, sino para todos los cristianos.

En palabras del Papa, este es el momento de un nuevo Jubileo, un tiempo de gracia que nos llama a la reconciliación, a la conversión y a un renovado encuentro con Dios.

La Puerta Santa no es sólo un umbral físico, sino un símbolo de la invitación divina a cruzar hacia un nuevo comienzo, un camino de esperanza que se abre ante todos.

Jubileo, indulgencia y perdón

El pasado fin de semana en la ciudad de Gualeguaychú se realizó lo que este sábado 4 de enero se hará en Victoria, donde el obispo diocesano en su homilía explicó la significancia de este rito que encierra liberación y perdón.

“Éste es un tiempo de gracia. Es un año en el que Dios nos mira de un modo particular y nos mima de un modo particular. Esto de celebrar tiempos jubilares es algo muy antiguo en el pueblo de Dios, en la tradición bíblica. Cada tantos años en el pueblo de Dios se celebraba un año jubilar y era el año para la liberación de los cautivos, era el año para dejar descansar la tierra, era el año para restituir lo que estaba embargado. Era el año para perdonar las deudas, era el año para recomenzar, como una oportunidad para comenzar de nuevo.”

“Recomenzar significa mirar hacia adelante, con una mirada de esperanza, pero también significa mirar hacia atrás, reconocer aquello que no estuvo bien en nuestra vida para poder pedir perdón y comenzar de nuevo por eso.”

Sobre la indulgencia destacó “La indulgencia está fuertemente vinculada al año jubilar, indulgencia que es perdón, el perdón necesario para recomenzar para poder mirar hacia adelante y que, sobre todo, es un don.”
“La indulgencia no es algo que se gana, sino algo que se recibe gratuitamente de Dios como un don, como algo que él, en su corazón grande, en su magnanimidad, quiere ofrecernos generosamente”.

“Este año jubilar está puesto bajo el signo de la esperanza. De hecho, desde que comenzamos la celebración allá en la parroquia Sagrada Familia y Santa Teresita, hemos escuchado innumerables veces la palabra esperanza, esperanza para los desesperanzados. Nosotros muchas veces necesitamos reanimar y reavivar nuestra esperanza, pero sobre todo, reanimar y reavivar la esperanza en aquellos que tienen el corazón herido o el corazón destrozado y que viven junto a nosotros.” Finalizó Monseñor Héctor Luis Zordán.